“Lamentablemente, las incertidumbres no sólo las tenemos en nuestro país, sino en el mundo entero y con probabilidades ciertas de una recesión”, advierte Álvaro Pino, director de la gremial.
Frente a un 2023 que se visualiza como desafiante, la industria minera se prepara para afrontar un eventual escenario económico más complejo y su potencial impacto en la demanda por minerales, ante lo cual aspectos como la eficiencia y la sostenibilidad resultarán claves.
En conversación con MINERÍA CHILENA, Álvaro Pino, director de la Asociación Gremial de Suministradores Técnicos y de Ingeniería para la Minería e Industria (Sutmin), analiza los factores que pueden impactar a las empresas en el corto plazo, destacando por ejemplo la relevancia de la formación del capital humano.
¿Qué proyecciones manejan para la minería nacional a 2023?
Es una industria que se encuentra en tensión, entre los desafíos internos asociados a la licencia social, la definición regulatoria de la reforma tributaria, y la oportunidad de tremendo potencial como es posicionar la industria minera de Chile como un motor del cambio de matriz energética mundial.
Como Sutmin creemos que este 2023 se deben enfrentar estos desafíos con la participación de todo el ecosistema minero, involucrando empresas y mundo político en la definición del royalty, involucrando proveedores, empresas mineras y comunidades en el establecimiento de una licencia social asociada a las prácticas de sustentabilidad en la industria e involucrando al gobierno para establecer políticas ambientales claras y expeditas que permitan a Chile crecer en producción sostenible y en inversión.
Junto con lo anterior, se espera un aumento en las medidas tendientes a potenciar la productividad y optimizar los costos, para que los incrementos de producción previstos generen aportes a las compañías, frente a los escenarios de incertidumbre de precios y regulación.
Lamentablemente, las incertidumbres no sólo las tenemos en nuestro país, sino en el mundo entero y con probabilidades ciertas de una recesión. Una de las importantes es que China, el principal comprador de cobre del mundo (55%), igualmente enfrenta escenarios complejos que de seguro tendrán impacto en nuestra actividad. La solución, aunque parezca trivial y simple, es producir más a menor costo y todos nos estamos preparando para ello, y no se logra haciendo más de lo mismo.
Una de las cifras es la que recientemente publicó la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), en que se estima que la producción minera crecería en torno al 6 -7%, alcanzando los 5,7 millones de toneladas.
Por su parte, la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) estima que el valor de la libra de cobre estaría en torno a los US$3,7 contra los US$3,98 que se estima para el cierre de este año, valor que de acuerdo a nuestros antecedentes, continuaría con la tendencia a aumentar la inversión en mejorar productividad y el 48% de las empresas lo hará en tecnología.
En Twitter destacaron un aumento en la variación de ofertas para profesionales de la minería. ¿A cuánto asciende este aumento? ¿Qué opinión le merece este escenario?
Se espera en efecto una variación de la oferta laboral para profesionales de la minería. Esta variación estaría asociada a la creciente tendencia de aumentar la complejidad tecnológica de los procesos, lo que está exigiendo personal con conocimiento en automatización. Junto con esto, se observa una tendencia fuerte en las campañas de equidad de género, lo que mantiene abierto un amplio abanico de ofertas laborales principalmente para mujeres.
A diferencia del pasado, las empresas mineras también están buscando habilidades blandas y las de conocimientos duros que complementen entre ellas lo que es la minería actual.
Los informes que se publican indican que el 55% de las empresas mineras estima que contratará más personal para sus funciones y así cumplir con las estrategias de desarrollo que enunciamos anteriormente.
Observamos que hay un cambio positivo en las culturas organizacionales producto de estas tendencias, dado que se incorporan valores y formas de interactuar que generan mejores vínculos de confianza y colaboración.
Desde el mundo de los proveedores, vemos que ProChile está trabajando en un esfuerzo real para llevar nuestra minería fuera de Chile, y agrupar proveedores para salir a captar otros mercados con nuestra experiencia y desarrollo de soluciones. Corporación Alta Ley suma con la “Mesa para la Internacionalización de las Soluciones para la Minería de Chile”, logrando la antigua frase o sueño de que seamos capaces de exportar minería y no sólo minerales.
Como Sutmin siempre nos hemos referido a que el ecosistema minero no es sólo empresas mineras, sino que también las cerca de 8.000 empresas que se registran como proveedoras de la minería, donde los desarrollos anteriores en capacitación, contar con los ingenieros y especialistas adecuados, va en directa relación a lo que suceda en las empresas mineras. Su crecimiento es también el nuestro y para eso nos preparamos.
FUENTE: Minería Chilena